Reducción de Pecho
La cirugía de reducción de pecho, también conocida como mamoplastia de reducción, es un procedimiento que se utiliza para eliminar el exceso de grasa, tejido y piel de senos hipertrofiados, a la vez que los levanta.
Este tipo de intervención suele emplearse con el objetivo de aliviar las molestias estéticas o funcionales de unas mamas demasiado grandes y para lograr un tamaño de senos proporcional al cuerpo de la paciente, además de permitir una mejora en la participación en actividades físicas.
La cirugía de reducción mamaria también puede ayudar a la paciente a mejorar su imagen personal y su capacidad para participar en actividades físicas.
¿Qué mujeres pueden optar por una cirugía de reducción de mamas?
Los factores más habituales que hacen que una mujer pueda ser candidata a una cirugía de reducción de pecho son:
- Senos hipertrofiados y descompensados con respecto al resto del cuerpo.
- Dolor crónico de espalda, cuello y hombros debido al peso de los senos.
- Erupción crónica o irritación de la piel debajo de los senos
- Actividad física restringida
- Problemas de autoestima o de imagen corporal relacionada con los senos grandes.
- Dificultad para encontrar sujetadores o ropa adecuada.
¿Qué pacientes no deberían optar a una mamoplastia de reducción?
- Mujeres fumadoras
- Personas con problemas cardíacos o con obesidad
- Mujeres que no haya completado su desarrollo físico, ya que podrían necesitar una segunda intervención con posterioridad
- Mujeres que quieran ser madres, ya que puede haber dificultades en la lactancia.
¿Cuál es el procedimiento para una reducción de pecho?
La intervención quirúrgica para la reducción de mamas que realizamos en Las Palmas de Gran Canaria conlleva el uso de anestesia general e incluye cirugía a través de incisiones y liposucción para eliminar el exceso de grasa en los senos. Habitualmente se siguen estos pasos:
- Antes de la intervención, el especialista hace un estudio completo de la anatomía de los senos de la paciente, decidiendo el tipo de abordaje a realizar en función de sus necesidades.
- El cirujano hace una incisión alrededor de la areola y en cada seno.
- A continuación, elimina el exceso de tejido mamario, grasa y piel para reducir el tamaño de cada seno.
- Posteriormente, remodela el pecho y reposiciona el pezón y la areola
Las cicatrices dependerán del tamaño de la mama, aunque al cabo de los meses se disimulan bastante, haciéndose casi imperceptibles.
¿Qué cuidados debo tomar ante una operación de reducción de mamas?
Antes de la intervención
- Si eres una mujer fumadora, debes dejar de fumar durante un cierto período de tiempo antes y después de la cirugía
- Evitar tomar aspirina, antiinflamatorios y ciertos productos de herbolario para controlar el sangrado durante la cirugía.
Después de la intervención
- Mantener en buen estado los vendajes que se aplicarán en las mamas tras la operación.
- Cuidar los drenajes que eliminarán el exceso de sangre o fluidos.
- Tomar los medicamentos prescritos para el dolor y los antibióticos para evitar infecciones.
- Usar un sujetador deportivo de compresión elástico sin aros para proteger los senos, que te recomendará el especialista.
- Limitar la actividad física en las semanas posteriores a la intervención.
¿Puede tener complicaciones la intervención de reducción de pecho?
Las complicaciones o molestias más habituales tras una intervención para reducir el pecho son:
- Dolor e inflamación en la zona intervenida durante algunos días después de la cirugía.
- Sensación de picor interno o prurito, como consecuencia de los puntos reabsorbibles que se colocan en la profundidad de la mama. En ocasiones se pueden prescribir antihistamínicos para mejorarlo.
- Hematomas, que desaparecen tras varios días después de la operación
- Pérdida de sensibilidad en los pezones y en areolas.
- Dificultad o incapacidad para amamantar
- Diferencias en el tamaño, la forma y la simetría de los senos, lo que podría dar lugar a la necesidad de otra cirugía.